Quisiera contarle, estimado lector, que nosotros, en El Colegio de San Luis, somos un Centro Público de Investigación integrante del Sistema de Centros Públicos de Investigación de la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación. Formamos parte de una red que se extiende a lo largo del país buscando, a grandísimos rasgos, contribuir al desarrollo económico, científico, social y cultural de México.
En particular, nuestro Colegio, orientado a la educación superior y de posgrado, se especializa en las Ciencias Sociales y las Humanidades, áreas inmensas del conocimiento que nos permiten comprender la complejidad humana, sus relaciones y problemáticas, entre un sinfín de aportaciones que no terminaría de enumerar.
Y que, en este presente pospandémico que pudiera parecer distópico a través de los lentes de la inteligencia artificial, desde nuestra trinchera son fundamentales para entender la diversidad cultural, la identidad nacional, la riqueza del estado al que pertenecemos, el pasado de donde venimos y el futuro al que quisiéramos llegar cuando pretendemos responder: ¿quiénes queremos ser?, ¿en qué nos queremos convertir?
Es en esta indagación sepa usted que estamos próximos a cumplir nuestra tercera década que, a través de la interdisciplina de nuestras líneas de conocimiento y el respaldo de nuestra estructura administrativa, unimos esfuerzos con la visión de impulsar y contribuir al acceso del derecho humano a la ciencia, a la cultura y al conocimiento. Todo ello con el propósito de extender sus alcances, incidir, descentralizar y transformar.
Y, ¿por qué no decirlo? Que nos permita soñar. Porque las personas que aquí se forman sueñan, y si bien son investigadoras de alto nivel académico, evaluadas con estándares de excelencia, también son seres humanos que, al alcanzar sus objetivos personales, académicos y profesionales sus sueños nos impulsan a cumplir los objetivos de nuestra comunidad.
Con esto en la mira, me permitiré adentrarme un poco en la labor que tengo la fortuna de realizar desde la Unidad de Vinculación, donde he tenido la oportunidad de reconocer a estudiantes y egresados que han alcanzado cuantos logros son posibles: desde titularidades institucionales hasta publicaciones editoriales, premios nacionales e internacionales de toda clase, por mencionar algunos de forma modesta. Todos ellos, en su andar, nos representan, nos motivan y, en sus dificultades, nos alientan a mejorar.
Habiendo mencionado el ámbito internacional, y desde un San Luis Potosí que nos da identidad desde el centro del país de desierto y de selva, que nos permite comprender mejor a quienes somos en el norte y a quienes somos en el sur, nos expandimos a lo largo de México mediante convenios con múltiples entidades públicas, civiles y privadas. También nos integramos al mundo con convenios internacionales que amplían nuestra visión de lo que existe y promueven lo que tenemos por ofrecer, fomentando espacios tangibles e intangibles de intercambio de conocimientos que contribuyen a divulgar nuestra cultura.
Y nuestra cultura no es un asunto menor: dinámica, multifacética, compartida e influenciada por todo lo que nos atraviesa lo propio y lo ajeno, también se construye en estas aulas y oficinas. Promovemos que, en su formación, se produzcan agentes de cambio capaces de coadyuvar a atender problemas sociales complejos a través del humanismo y del enfoque en las personas, con una perspectiva interdisciplinaria y de creación de redes, indispensables para evolucionar.
Son estas redes las que nos sostienen y representan una de las herramientas más importantes para impulsarnos a encontrarnos y entendernos desde lo que cada uno puede aportar. El Colegio gestiona, desde su Unidad de Vinculación, y participa en múltiples redes académicas que abarcan este y otros continentes; trabaja en conjunto con Consejos y Comités municipales, estatales y nacionales; colabora como parte de Juntas Directivas y de Gobierno de diferentes instituciones públicas y culturales; promueve vocaciones científicas de distintos sectores mediante diversos programas; se vincula con la industria; y ha contribuido a la gestión de los Planes Estatales de Desarrollo, entre muchas otras acciones que tienen como uno de sus objetivos principales incidir en las políticas públicas y estar presentes en la vorágine que representa el continuo devenir de nuestra sociedad, buscando apoyar a cimentar su transformación mediante el conocimiento y la colaboración.
Llegaremos a los próximos desafíos reconociendo el capital cultural ganado y fortalecido, los lazos estrechados y la labor realizada a favor del ecosistema científico y cultural. Lo haremos ejecutando proyectos en beneficio de la sociedad, intercediendo a favor del conocimiento y de las políticas públicas que lo sostienen y, sobre todo, reiterando nuestro compromiso con la comunidad. Pasen a conocernos: mi casa es su casa.