La Selección Mexicana de Fútbol, ahora en su categoría mayor, parece no encontrar un estilo de juego capaz de calmar a una afición que espera con ansias la justa mundialista.
Goleados y superados por una Selección Colombiana de mayor nivel —con jugadores claramente superiores—, los dirigidos por el “Vasco” Aguirre fueron exhibidos en la cancha.
Los futbolistas mexicanos, ampliamente rebasados por el ritmo y calidad del rival, dejan entrever un futuro inmediato preocupante, con los focos rojos ya encendidos por el bajo nivel mostrado por el combinado azteca.
Y la noche de este martes, en un empate 1-1 frente a Ecuador en el Estadio de las Chivas, volvió a notarse una selección gris y sin ideas. Más allá del gol de Germán Berterame, el resto del partido fue monótono, recordando por momentos a aquella era del “Tata” Martino.
Tal parece que no todo se resuelve con lucha y garra. Los seleccionados comienzan a mostrar signos de cansancio ante una metodología que parece ya no conectar, propia del estilo del Vasco.
Focos rojos encendidos. Un SOS para el bombero histórico de la selección. El barco, una vez más, navega por aguas turbulentas.