2 de octubre: la memoria como forma de lucha

Por

Paola Torres

- viernes, octubre 3 de 2025

El 2 de octubre no es una fecha cualquiera. Es una herida abierta en la historia de México, un recordatorio de lo que ocurre cuando el poder se siente intocable y cuando la juventud se atreve a cuestionarlo. Recordar la masacre de Tlatelolco de 1968 no es un ejercicio del pasado; es un acto de resistencia presente, de memoria viva y necesaria.

Los movimientos estudiantiles han sido, históricamente, el corazón crítico de México. Desde las protestas de 1968 hasta las más recientes manifestaciones por Ayotzinapa, los estudiantes han sido la voz que incomoda, que denuncia, que exige. No tienen miedo de soñar con un país distinto, más justo, más democrático. Por eso incomodan. Por eso, tantas veces, se les reprime.

Hoy, más que nunca, necesitamos recordar. En tiempos donde la verdad puede ser manipulada, donde el poder busca controlar la narrativa, nuestra mejor defensa es la memoria. Una memoria colectiva, crítica y activa. Porque el 2 de octubre no solo es una fecha. Es una advertencia. Es una promesa. Es la historia que aún estamos escribiendo.