Sin más preámbulos, la fecha seis ha concluido dándonos un vistazo a qué equipos despegarán a partir de la mitad del torneo. Una fecha que nos ha traído de nueva cuenta la polémica, principalmente con los temas arbitrales, siendo protagonistas el Club América y el silbante “Gato” Ortiz.
Abrió la jornada un clásico de la 57 ya desangelado, en el cual la escuadra potosina no logró ni rescatar un punto contra un Querétaro limitado, pero con ganas de llevarse este encuentro. Los pupilos de Abascal se están estancando por debajo de la media tabla y con riesgo de caer más al fondo ya que el próximo viernes se enfrentarán al Toluca. Ambas escuadras se quejaron del arbitraje con una actuación realmente triste.
Las Chivas de Milito, parecía que se llevaban una durísima derrota en la frontera al estar cayendo 3 goles por cero al restar 15 minutos de partido, pero con corazón pudieron rescatar el resultado y llevarse un empate del Caliente, aun así el conjunto rojiblanco no se le ve que tenga un buen futuro en el presente torneo.
Y tenemos nuevo líder con La Pandilla que sin despeinarse y con gol olímpico de Canales golearon a un Necaxa de Fernando Gago, que no levanta al conjunto hidrocálido, se le está acabando el crédito al ex técnico de Boca.
Un Cruz Azul que sigue rescatando puntos sin mostrar un buen juego ganando al campeón Toluca, que recientemente quedó eliminado de la Leagues Cup y encontraron un pequeño bache de funcionamiento en estos últimos partidos.
En un empate sin goles se dio el debut de Aaron Ramsey en el Pumas vs Puebla. Lo único trascendente en ese partido.
Y para cerrar la jornada, se dio el Atlas vs América, que pintaba para ser un encuentro divertido, pero por la lluvia comenzó una hora más tarde de lo programado. Con goles realmente soberbios por ambas escuadras, el conjunto americanista pudo imponerse, pero no dejando la polémica detrás. Ya que el Gato Ortiz marcó dos penales (el ultimo realmente dudoso) y con esto, mantiene una racha de más de siete penales consecutivos marcándole a favor a la escuadra capitalina. ¿Coincidencia o favoritismo?