El Tesla Roadster lanzado por Elon Musk en 2018 ha sido confundido recientemente con un asteroide cercano a la Tierra, lo que ha generado preocupación entre los astrónomos sobre la falta de control de los objetos enviados al espacio.

El 2 de enero de 2025, un astrónomo aficionado detectó un objeto a unos 240,000 kilómetros de la Tierra, inicialmente catalogado como un asteroide cercano a nuestro planeta. Sin embargo, tras una revisión, los astrofísicos descubrieron que el objeto era en realidad el Tesla Roadster que Musk había enviado al espacio como carga útil en una prueba de SpaceX. Esta confusión subraya los riesgos de no tener un registro claro de los objetos lanzados, ya que podrían ser confundidos con asteroides reales y desviar recursos destinados a la detección de verdaderas amenazas.

Este no es el primer caso de confusión en el espacio. Al menos cuatro naves espaciales han sido erróneamente identificadas como asteroides en el pasado, lo que resalta la necesidad de mejorar la supervisión de los objetos humanos en órbita. La situación del Tesla Roadster pone en evidencia la importancia de monitorear adecuadamente estos objetos para evitar malentendidos que puedan poner en peligro los esfuerzos para detectar asteroides peligrosos.