Supervisa INAH trabajos de mantenimiento en el Museo de Arte Sacro de Guadalcázar

Se intervinieron pinturas, esculturas, mobiliario y objetos de orfebrería.

Por

Ernesto García

- martes, abril 15 de 2025

San Luis Potosí, martes 15 de abril de 2025.- Con el objetivo de conservar y poner en valor el patrimonio histórico y religioso de San Pedro de Guadalcázar, el Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en San Luis Potosí supervisó los trabajos de mantenimiento en el Museo de Arte Sacro de dicho municipio, localizado a 80 kilómetros de la capital potosina.

Las labores de intervención se concentraron en las dos salas que ocupa actualmente el recinto museístico, ubicadas en lo que fueron el camarín y la capilla de la Virgen del Refugio, anexas a la parroquia de San Pedro Apóstol. El inmueble, de origen barroco, fue construido en el primer cuarto del siglo XVIII y conserva elementos neoclásicos incorporados en el siglo XIX.

La restauradora Luisa Cecilia Carreras Lomelí, del Centro INAH SLP, explicó que antes del proceso de restauración se llevó a cabo una completa documentación escrita, gráfica y fotográfica del estado del inmueble y de los bienes muebles que conforman su colección. La parroquia y su curato, señaló, fueron parte del auge minero del Altiplano potosino, lo que propició un valioso acervo artístico y religioso, principalmente del siglo XVIII.

Entre las piezas intervenidas se encuentran pinturas, esculturas, mobiliario y objetos de orfebrería. Destacan tres obras del pintor novohispano Francisco Martínez, dedicadas a escenas de la vida de la Virgen María: La adoración de los reyes, La natividad del niño y La visitación. Estas fueron sometidas a procesos de limpieza y consolidación de su capa pictórica.

Además, se atendieron 11 piezas más de orfebrería y se iniciaron trabajos de conservación en 16 esculturas de bulto policromadas, 14 de ellas del siglo XVIII, algunas con rasgos físicos asiáticos, posiblemente vinculadas al intercambio comercial entre la Nueva España y Filipinas. Dos esculturas del siglo XIX también forman parte del acervo: un Cristo crucificado tallado en madera y una Virgen de la Soledad utilizada en procesiones.

Por su parte, el restaurador Israel Hernández Méndez, originario de Guadalcázar y encargado de los trabajos estructurales del inmueble, informó que las labores incluyeron la corrección de problemas de humedad, atención de grietas y filtraciones, así como la restauración de muros, bóvedas y arcos con materiales compatibles con la fábrica original. También se repusieron vidrios, se ajustaron luminarias y se realizaron calas estratigráficas.