Cdmx., viernes 28 de noviembre de 2025.- La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmó este viernes que Alejandro Gertz Manero dejará la Fiscalía General de la República (FGR) para ocupar una embajada, tras casi siete años al frente del organismo autónomo. La mandataria aseguró que fue ella quien ofreció el cargo diplomático al fiscal, quien aceptó la propuesta, aunque evitó precisar a qué país será enviado. “Hasta que el país no acepte las credenciales no puede anunciarse”, sostuvo.
Sheinbaum destacó que la salida de Gertz permitirá fortalecer la coordinación con la futura administración de la FGR. En ese sentido, informó que Ernestina Godoy, exconsejera jurídica de la Presidencia y extitular de la Fiscalía de la Ciudad de México, fue designada por el propio Gertz como responsable del área de Control Competencial, instancia que funge como suplencia legal del fiscal hasta que el Senado elija a su reemplazo definitivo. Godoy asumirá funciones este mismo viernes, mientras que en la Consejería Jurídica quedará como encargado de despacho Raúl Jiménez.
Aunque la presidenta elogió a Godoy —a quien calificó como “una mujer extraordinaria, honesta y de convicciones”— aclaró que la decisión final sobre quién encabezará la FGR corresponde al Senado. “Ella ya demostró resultados cuando fue fiscal en Ciudad de México, pero es el Senado quien debe decidir”, dijo.
La renuncia de Gertz llegó tras una jornada de tensiones y negociaciones que se prolongaron el jueves. Pese a que el fiscal tenía asegurado su cargo hasta 2028, debido a la reforma que transformó la Procuraduría en Fiscalía y que permite un periodo superior a un sexenio, la Presidencia buscaba su relevo desde semanas atrás. El artículo 102 constitucional solo permite remover al fiscal por causa grave, por lo que la salida diplomática fue la vía pactada.
El documento entregado al Senado por Gertz evitó usar la palabra “renuncia”, pero confirmó su retiro del cargo al aceptar la embajada: “Me va a permitir la posibilidad de continuar sirviendo a mi país en una nueva tarea que me honra y que agradezco”.
Horas después, el Senado validó la salida del fiscal, lo que activó el proceso de sucesión: la Cámara Alta tiene 20 días para elaborar una lista de diez candidatos que enviará a la Presidencia; de esa lista, Sheinbaum deberá seleccionar una terna final que regresará al Senado para su votación.
El relevo en la FGR se convierte así en uno de los primeros movimientos institucionales de alto calibre en el inicio del gobierno de Sheinbaum, que busca imprimir un nuevo rumbo a la procuración de justicia en el país.