Desde mediados de noviembre, santuarios de la mariposa monarca en Michoacán, ubicados en el oriente del estado, abrieron sus puertas para recibir a miles de turistas nacionales e internacionales. La temporada de observación de estas impresionantes migrantes durará hasta marzo, permitiendo que los visitantes puedan disfrutar de este fenómeno natural en los bosques de oyamel.
La afluencia de turistas este año se espera sea mayor a medio millón, según autoridades locales, quienes señalan que los visitantes podrán explorar los santuarios de El Rosario, Sierra Chincua y Senguio, todos abiertos de 9 a 17 horas durante la semana.
Las autoridades locales han hecho un llamado para que los visitantes respeten el entorno natural de las mariposas monarca, lo cual implica no tocarlas, no hacer ruidos fuertes, evitar fumar y no ingresar con mascotas al área protegida. Estas medidas son esenciales para asegurar la conservación de este ecosistema.
El arribo anual de millones de mariposas a Michoacán no solo es un atractivo turístico, sino también un símbolo cultural de la región, reconocido internacionalmente como uno de los fenómenos naturales más sorprendentes del mundo.