Tras permanecer cerrada por varias semanas debido a las intensas lluvias que ocasionaron un incremento en los niveles de los ríos y parajes, la Cascada de Tamul en la Huasteca Potosina ha reanudado sus actividades y está lista para recibir a los turistas.

Desde este jueves 8 de agosto, la Cascada de Tamul ha reabierto sus puertas a los visitantes, quienes podrán disfrutar de la majestuosa caída de 105 metros de altura. Además, se podrán realizar paseos en canoa por el río Tampaón, caminatas por senderos ecológicos y nadar en el agua.

Es el salto de agua más grande de San Luis Potosí y uno de los lugares favoritos de México, conocido por su color azul turquesa.

Recientemente, se había registrado una gran sequía que afectó a la Huasteca Potosina, dejando sin agua a esta cascada, el principal atractivo de la región. Esto había generado preocupación entre los prestadores de servicios turísticos del municipio de Aquismón por las posibles afectaciones económicas. Sin embargo, la emblemática cascada se ha recuperado de la sequía.