El nombramiento de Bernarda Reyes Hernández como directora general del Instituto de Desarrollo Humano y Social de los Pueblos y Comunidades Indígenas (INDEPI) ha generado críticas entre organizaciones defensoras de los derechos indígenas en San Luis Potosí, quienes señalan rezagos en su desempeño, especialmente tras las consultas indígenas que resultaron en 12 impugnaciones a artículos de la ley electoral.
El Observatorio Indígena Mesoamericano expresó su rechazo, argumentando que la exdiputada y expresidenta de la Comisión de Asuntos Indígenas tiene un historial que perjudicó a los pueblos indígenas del estado.
La organización cuestionó su desempeño, indicando que, durante su gestión como diputada, Reyes Hernández no defendió adecuadamente los intereses de las comunidades que ahora debe proteger.
Además, el Observatorio señaló que, bajo la dirección de Reyes Hernández en la Comisión de Asuntos Indígenas, no se implementaron medidas para evitar el déficit presupuestal que afecta al INDEPI, lo que limita sus operaciones y, según los activistas, deja en vulnerabilidad a las comunidades indígenas en el estado.