La noche de este sábado, alrededor de las 9:00 p.m., una niña de siete años fue atacada por un perro mientras jugaba al fútbol con sus amigos y su tía en la cancha del parque de San Lorenzo.

Según testigos, el incidente ocurrió cuando la niña fue a recoger una pelota que había caído cerca del animal, un perro que estaba con su dueño y dos menores de edad. A pesar de que el perro llevaba correa, saltó y mordió a la niña en el abdomen.

La tía de la menor fue la primera en socorrerla al notar que la niña tenía una herida sangrante en el abdomen, con moretones visibles y signos de derrame.

Los padres de la niña acudieron rápidamente para revisarla, confirmando la gravedad de la mordida, mientras los presentes señalaban al perro y a su dueño como responsables.

De acuerdo con los testigos, el perro parecía ser un bulldog francés. La madre de la menor se acercó al dueño del perro para pedir explicaciones y exigir responsabilidad.

Inicialmente, el hombre negó que su perro hubiera sido el responsable, pero ante la presión de los testigos, finalmente admitió su culpabilidad.

Ante el reclamo de la madre, el dueño aseguró que contaba con la cartilla de vacunación del animal y se comprometió a hacerse responsable.

Sin embargo, después de que sus hijos se llevaron al perro, el dueño se retiró a su domicilio, ubicado a un costado del parque de San Lorenzo, y no volvió a salir para dar la cara.

La niña fue trasladada de inmediato a urgencias debido a que continuaba sangrando y requería atención médica urgente.

La madre regresó a la vivienda del dueño del perro para exigir respuestas y presentar una denuncia, pero no obtuvo respuesta. Aunque una patrulla llegó al lugar, nadie salió a atender el llamado.

Ahora, la familia de la menor exige que el dueño del perro asuma los costos médicos y que el animal sea sometido a observación por al menos 10 días, para descartar cualquier riesgo de rabia y evaluar las vacunas que podrían ser necesarias para la niña.