La designación de Jorge Luis Díaz Salinas como nuevo titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario y Recursos Hidráulicos (Sedarh) del Gobierno de San Luis Potosí ha generado indignación y rechazo por parte de diversas organizaciones ciudadanas. Ya que estuvo inmiscuido en el escándalo conocido como el Moches Gate de Ciudad del Maíz, en el que se desviaron millones de pesos destinados a la construcción de caminos rurales.
Díaz Salinas, exdiputado local del PAN, también ha estado vinculado a la red de corrupción de la llamada, peor legislatura de la historia, donde se le acusó de usar empresas fantasmas y documentos falsos para desviar recursos públicos. Aunque fue denunciado penalmente, ha permanecido en libertad y ahora se le recompensa con un alto cargo en el gabinete estatal.
Organizaciones como Ciudadanos Observando han denunciado que este nombramiento representa un pacto con la herencia maldita que el gobierno actual ha criticado públicamente, pero con la que, aseguran, sigue colaborando. La falta de consecuencias legales para Díaz Salinas, afirman, pone en evidencia la impunidad que prevalece en la administración estatal.
Ante esta situación, las organizaciones ciudadanas han manifestado su rechazo al nombramiento, al considerarlo una señal de que la corrupción sigue siendo premiada en San Luis Potosí, y exigen que se tomen medidas para evitar que personajes con antecedentes de fraude ocupen puestos de poder.