Nueva York, E.U.A., martes 24 de septiembre de 2025. – Durante la apertura del 80 periodo de sesiones de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que los países del mundo se “están yendo al infierno” debido a la inmigración descontrolada y al “engaño” del cambio climático, y subrayó que sólo podrán superar estos desafíos trabajando de la mano con Estados Unidos.
En un discurso que superó la hora de duración, Trump destacó que en los últimos siete meses logró poner fin a siete conflictos armados, y lamentó que la ONU no haya intervenido para resolver estas situaciones. “Lamentablemente, Naciones Unidas no hizo nada”, afirmó.
El mandatario también hizo referencia a problemas técnicos al iniciar su intervención, señalando que sólo contaba con una “escalera mecánica que se detuvo a la mitad y un teleprompter que no funcionaba”.
Trump se dirigió a la Asamblea después de los discursos del secretario general de la ONU, António Guterres, de la presidenta de la Asamblea General, Annalena Baerbock, y del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, quienes hicieron un llamado a la cooperación internacional para enfrentar la pobreza, la desigualdad, el cambio climático y los conflictos en Gaza y Ucrania.
Su intervención contrastó con la de los primeros oradores, y en ella destacó sus logros nacionales e internacionales, incluidas las medidas de seguridad en su país y las políticas migratorias, sugiriendo nuevamente que estos esfuerzos lo hacen merecedor del Premio Nobel de la Paz.
El mandatario también planteó que la solución a los problemas globales es “clara y directa”: ofrecer el liderazgo y la cooperación estadounidense a los países dispuestos a construir un mundo más seguro y próspero. Sin embargo, advirtió que esta ayuda no sería incondicional y centró gran parte de su discurso en dos de las prioridades de la agenda conservadora estadounidense: frenar la migración y desestimar la crisis climática.
“Es hora de poner fin al experimento de fronteras abiertas. Sus países se están yendo al infierno”, dijo, y advirtió que Europa enfrenta serias dificultades por la llegada de migrantes irregulares, situación que calificó de insostenible. Trump acusó además a la ONU de fomentar la migración al ofrecer asistencia a los refugiados.