La doctora Julia Gabriela Eraña López, investigadora de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), recomendó evitar el despilfarro y hacer un uso responsable del aguinaldo, en especial para aquellos que lo reciban.
Aconsejó que las compras se realicen según el presupuesto estipulado y destacó la importancia de dejar de lado la presión de la sociedad de consumo. Recordó que el afán de cumplir con expectativas de fiestas y despilfarro puede convertir la cuesta de enero en una carga aún mayor.
Eraña López instó a los mexicanos a no caer en la irracionalidad del gasto. Añadió que, si se recibe aguinaldo, se destine una pequeña cantidad al ahorro. Además, advirtió que el mejor gasto es aquel que no genera crisis emocional, como la depresión, la angustia o el pánico, derivados de no poder cubrir las deudas después de las festividades.
La doctora también subrayó la importancia del consumo para el funcionamiento de la economía nacional, pero recalcó que este debe ser equilibrado en todos los niveles sociales y económicos. Señaló que un consumo responsable forma parte de las políticas públicas nacionales.
Desde una perspectiva ética, Eraña López invitó a la población a contribuir al bienestar colectivo a través de aportaciones a asociaciones civiles y apoyar el cuidado del medio ambiente con prácticas de consumo responsable.
El aguinaldo se estableció como una prestación en la Ley Federal del Trabajo en 1970, pero, según datos recientes, solo entre el 50 y el 54 por ciento de la población económicamente activa recibe este beneficio.
Ante esta realidad, la especialista señaló que, aunque la legislación mexicana obliga a los empleadores a pagar el aguinaldo antes del 20 de diciembre, existe una notable desigualdad económica, ya que alrededor del 46 por ciento de los trabajadores no reciben este beneficio debido a que laboran en la informalidad.