San Luis Potosí, domingo 6 de abril de 2025.- En las últimas semanas, las redes sociales han sido invadidas por retratos transformados en personajes al estilo de Studio Ghibli, impulsados por tecnologías como las ofrecidas por OpenAI. Sam Altman, CEO de la empresa, fue uno de los más activos en mostrar estos resultados en sus plataformas.
Aunque Miyazaki no ha comentado directamente sobre este fenómeno, ha sido claro en otras ocasiones respecto a su postura. El cineasta japonés, conocido por obras como Mi vecino Totoro y El viaje de Chihiro, ha criticado rotundamente el uso de la inteligencia artificial en el ámbito artístico. Según él, las imágenes generadas por IA carecen de alma y representan una amenaza al verdadero propósito de la creación.
Miyazaki ha subrayado que el arte debe estar vinculado a la experiencia humana y no puede reducirse a un proceso automatizado. A su juicio, la automatización del acto creativo podría conducir a una crisis espiritual y social más profunda. Esto se ha reflejado en sus críticas a la tendencia de generar imágenes de estilo Ghibli, las cuales, aunque celebradas por muchos como un homenaje, para él representan una forma de vaciar el arte de su contenido genuino.
El rechazo del director no es solo una cuestión estética, sino una advertencia sobre el rumbo que podría tomar la sociedad al depender cada vez más de la inteligencia artificial para la creación de imágenes. En su visión, delegar el arte a la tecnología podría significar la pérdida de la conexión profunda con la vida y la naturaleza.