El cine mexicano despide a una de las estrellas que marcaron la Época de Oro. Alma Rosa Aguirre, nacida en Chihuahua, inició su trayectoria artística en 1946 con la película El sexo fuerte, donde actuó junto a su hermana Elsa Aguirre. A partir de ese momento, su talento y carisma la llevaron a ser una de las actrices más prolíficas de la industria, destacando en producciones emblemáticas como La familia Pérez, El siete machos y Nosotras las sirvientas.
La Casa del Actor, institución donde la actriz pasó sus últimos años, confirmó la noticia de su fallecimiento a través de un comunicado oficial, expresando sus condolencias a sus seres queridos y destacando el respeto y admiración que siempre recibió de sus compañeros. El mensaje incluyó un reconocimiento especial a su hermana Elsa Aguirre, también destacada figura del cine mexicano.
Aunque Alma Rosa se retiró temporalmente en la cúspide de su carrera para enfocarse en su vida familiar, regresó brevemente al cine en 1972 con la película El diablo anda entre monjas, compartiendo escena con Vicente Fernández. En 2018, decidió mudarse a La Casa del Actor, un espacio que brinda apoyo a figuras retiradas del espectáculo, donde vivió rodeada de tranquilidad y el aprecio de la comunidad artística.
Hasta el momento, no se han dado detalles sobre las causas de su fallecimiento ni los arreglos funerarios. Su partida deja un legado imborrable en la historia del cine nacional y un recuerdo vivo de su contribución a una de las épocas más importantes de la cinematografía mexicana.