El coordinador estatal de IMSS-Bienestar, Fernando Díaz de León, reconoció que actualmente el sistema enfrenta un desabasto significativo de medicamentos, estimado entre el 50 y el 60 por ciento. Este reconocimiento destaca una falta generalizada en la disponibilidad de fármacos, que afecta a casi la mitad de los suministros necesarios.

Díaz de León anunció que, para abordar esta crisis, se está implementando una compra extraordinaria de medicinas con el objetivo de mejorar la distribución antes de que termine el año 2024. Esta situación ha puesto en evidencia problemas con la operación de la “megafarmacia” del Bienestar, una instalación que, según el presidente Andrés Manuel López Obrador, debía garantizar el suministro de medicamentos en un plazo máximo de 48 horas para diversas instalaciones de salud.

El coordinador también subrayó que el desabasto actual refleja deficiencias en el sistema y comprometió esfuerzos para resolver estos problemas lo más pronto posible. La administración del IMSS-Bienestar trabaja para solucionar estos inconvenientes y asegurar un mejor abastecimiento de medicamentos en el futuro cercano.