San Luis Potosí, martes 16 de diciembre de 2025.– La organización Cambio de Ruta, A.C. logró que el Primer Tribunal Colegiado en Materias Civil y Administrativa del Noveno Circuito confirmara la vigencia del decreto que reconoce como Área Natural Protegida la zona de la Presa de San José, actualmente conocida como Paseo de la Presa, con una extensión aproximada de 344 hectáreas dentro del municipio de San Luis Potosí.

El director de la asociación civil, Luis González Lozano, explicó que el proceso legal tuvo su origen en un recurso promovido por la Comunidad de San José de Buenavista, cuyo objetivo era dejar sin efectos el decreto administrativo emitido el 5 de junio de 1996, mediante el cual el Gobierno del Estado otorgó protección ambiental a esa área.

De haber prosperado dicha impugnación, advirtió, el impacto habría sido severo, ya que la zona habría quedado sin resguardo legal, abriendo la puerta a desarrollos inmobiliarios impulsados por intereses políticos y económicos, además de poner en riesgo el valor ecológico, ambiental y social del área.

Ante este escenario, Cambio de Ruta, A.C. interpuso un juicio de amparo con el propósito de salvaguardar el interés colectivo y el derecho de la población a un medio ambiente sano, sin afectar derechos individuales. A través de este recurso legal, la organización solicitó no solo la ratificación del decreto de protección, sino también el cumplimiento de una obligación pendiente por parte de las autoridades: la elaboración del programa de manejo del Área Natural Protegida.

Tras un litigio que se prolongó por nueve años, el Tribunal resolvió mantener la validez del decreto de 1996, rechazó la pretensión de eliminar la categoría de protección ambiental y concedió el amparo a los integrantes de la asociación civil. Como parte de la sentencia, ordenó a las autoridades estatales y municipales emitir de manera inmediata el plan y programa de manejo, así como garantizar su publicación oficial y correcta implementación.

Con esta resolución, la Presa de San José mantiene su estatus de Área Natural Protegida, se frena cualquier intento de debilitar su resguardo legal y se refuerza la conservación de un espacio clave para el equilibrio ecológico de la ciudad y el bienestar de las generaciones actuales y futuras.