Congelan cuentas bancarias de dueño de Miss Universo

Empresario Raúl Rocha Cantú está siendo investigado por tráfico ilegal.

Por

Redacción

- viernes, diciembre 5 de 2025

Ciudad de México, viernes 5 de diciembre de 2025.– La Unidad de Inteligencia Financiera ordenó el congelamiento de cuentas bancarias del empresario regiomontano Raúl Rocha Cantú, señalado en investigaciones federales por su presunta vinculación con una red dedicada al tráfico ilegal de combustible y armas al servicio de grupos criminales.

Rocha Cantú, conocido por poseer la mitad de la franquicia de Miss Universo y encabezar un conglomerado de casinos, hospitales y empresas de seguridad, enfrenta una investigación abierta por la Fiscalía General de la República, la cual confirmó que el caso continúa en integración.

El mismo día en que la FGR informó los avances del expediente, el empresario se acogió al criterio de oportunidad como testigo colaborador, después de que un juez federal emitiera órdenes de captura contra él y otras 12 personas por presuntos delitos de delincuencia organizada, narcotráfico, huachicol y tráfico de armas.

Documentos judiciales consultados detallan que Rocha Cantú es considerado probable responsable de delitos en materia de hidrocarburos, operaciones con recursos de procedencia ilícita y tráfico de armamento. La carpeta de investigación iniciada en 2024 a partir de una denuncia anónima señala la existencia de una estructura que habría operado en distintas entidades del país.

El mandamiento judicial menciona además a otros presuntos involucrados identificados como Kevin, Jacobo Reyes León, Jorge Alberts Ponce, Alejandro, Íker y Daniel Roldán, quienes integrarían una organización dedicada a la compraventa de armas, lavado de dinero y actividades relacionadas con hidrocarburos. Según la denuncia, las armas de alto calibre ingresaban al país por la frontera con Guatemala, eran ocultadas en autobuses de carga irregular y comercializadas a través de plataformas digitales.

Las autoridades también refieren que parte de los implicados estarían vinculados a una empresa de seguridad privada ubicada en la alcaldía Álvaro Obregón de la Ciudad de México, la cual habría sido usada para lavar dinero de otras organizaciones criminales, entre ellas La Unión y el Cártel Jalisco Nueva Generación, además de facilitar la compra y venta de armamento.