La Comisión de Puntos Constitucionales aprobó por unanimidad una reforma constitucional que garantiza que el salario mínimo en México no se sitúe por debajo de la inflación, proporcionando así mayor protección a los trabajadores ante el aumento del costo de vida.

Esta medida implica modificaciones al artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, específicamente en el primer párrafo de la fracción VI del Apartado A, así como la adición de un tercer párrafo a la fracción IV del Apartado B.

Carlos Artemio Arreola Mallol, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, destacó que la reforma tiene como objetivo que los ajustes salariales se realicen con base en la inflación.

Esto no solo hará más justo el salario mínimo, sino que también permitirá la homologación de salarios en sectores clave, como las fuerzas armadas, los trabajadores de la educación en nivel básico de tiempo completo y los trabajadores de la salud.

La modificación asegura que el salario mínimo nunca sea inferior al promedio de los salarios registrados por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), un paso significativo para evitar que los trabajadores pierdan poder adquisitivo.

El dictamen aprobado forma parte de una serie de reformas federales que se espera que el Congreso local reciba en el futuro. Además, Arreola Mallol mencionó que están a la espera de la discusión en el Senado de dos iniciativas importantes: la reforma energética y el programa Jóvenes Escribiendo el Futuro.