PHOENIX, Arizona a 14 de septiembre del 2022.-Bastó media hora para que el desierto de Arizona mostrara a los integrantes de la organización Águilas del Desierto, restos humanos de un migrante no identificado, abandonado por traficantes de personas en el intento de cruzar a Estados Unidos.
Esto no paró a una veintena de hombres y mujeres voluntarios de esta organización fundada hace más de 12 años por Vicente Rodríguez de 83 años de edad, dedicada a la búsqueda y rescate de migrantes que son abandonados por “polleros” en el inmenso desierto; ya que la misión era localizar a un joven de Guatemala que desde hacía una semana sus familiares sólo sabían que ya no pudo caminar.
El migrante de 20 años de edad, fue dejado abandonado a su suerte sin agua y comida; bajo temperaturas de entre 50 y 55 grados y, a merced de animales venenosos como víboras de cascabel, escorpiones, tarántulas, mamíferos como el león de montaña, pumas o coyotes.
La búsqueda continuó bajo temperaturas de unos 50 grados, por hombres y mujeres de entre 18 y 60 años de edad, que una vez cruzaron a este país de forma irregular y, ya regulada su situación migratoria, trabajan en diversas actividades como en la albañilería, pintura y en empresas dedicadas a la construcción; pero los fines de semana donan su tiempo y esfuerzo para la búsqueda de personas que buscan el anhelado “sueño americano”.
A mediados del mes de julio del año en curso, familiares del joven contactaron al coordinador de Águilas del Desierto, Ely Ortiz para solicitar el apoyo a la búsqueda de su hijo. A pesar del esfuerzo no se logró localizar al joven, pero si restos de otra persona no identificada.
NOSOTROS VIVIMOS EN CARNE PROPIA LA PÉRDIDA DE SERES QUERIDOS EN EL DESIERTO: ELY ORTIZ Hace poco más de 10 años, Ely Ortiz vivió en carne propia el dolor de perder a un hermano y un primo, que fueron abandonados por el “coyote” en el desierto”. “Pasamos muchas horas de angustia, desvelo y preocupación por no saber nada de nuestros seres queridos”.
Señala que cuatro meses y medio después de que sus familiares fueron abandonados en el desierto, pidió apoyo de la organización, participando en la búsqueda. Bastó unas horas y recorrer parte del inmenso desierto de Arizona para que Ely localizara los restos de sus familiares.
Bastó unas horas y recorrer parte del inmenso desierto de Arizona para que Ely localizara los restos de sus familiares.
“Cuando miré el cuerpo de mi hermano y mi primo no lograba entender, recordaba a mi hermano como era en vida y bajaba la mirada y veía las facciones de su calavera, me creó un trauma muy grande el olor que despedía”, narra con profunda tristeza, el oaxaqueño, nativo de Huajuapan de León, enclavado en la región mixteca.
Refiere que, a partir de ese día, se identificó con la misión de Águilas del Desierto; que es darles paz a las familias realizando la búsqueda y rescate de sus seres queridos para encontrarlos vivos, pero si es muertos para que descansen en paz en un lugar donde les lleven flores o una veladora. En esta lucha por rescatar a migrantes con vida, se sumó también Maricela Ortiz, esposa de Ely Ortiz, quienes con el apoyo total del fundador y líder de las Aguilas del Desierto, Vicente Rodríguez se han ganado el respeto por su extraordinario trabajo.