El internacionalista de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), Flavio Rafael González Ayala, indicó que las aerolíneas estadounidenses que operan en el estado, ya no estarán autorizadas para abrir nuevas rutas internacionales o ampliar sus horarios, debido a que el sistema aéreo estatal no se encuentra dentro de los mejores a nivel nacional, dicha descalificación afectará la competitividad y el crecimiento turístico internacional para San Luis Potosí.
Indicó que la degradación de nivel 1 a nivel 2 a la Agencia Federal de la Aviación Civil (AFAC), ha provocado que la competitividad de las líneas aéreas nacionales se vea reducida; lo que repercute a las aerolíneas mexicanas que comparten códigos con las de Estados Unidos, ya que ahora los usuarios deberán comprar más boletos para hacer viajes internacionales.
Aunque debe entenderse que la aviación de Estados Unidos y a nivel mundial, quieren volver a entrar en competencia debido a las afectaciones ocasionadas por la pandemia por Covid 19, González Ayala señaló que debe tomarse en cuenta que el Gobierno Federal ha cometido una serie de errores en la evaluación, ya que las líneas aéreas mexicanas cumplen con las medidas de seguridad y los protocolos internacionales.
«Las aerolíneas no están mal, sí la actuación de varias instituciones del gobierno», señaló. Además de que podría generar crisis financieras a las líneas aéreas mexicanas que ya se encontraban en un momento difícil, como el caso de Interjet.
El internacionalista explicó que sería hasta 2022 cuando se podría recuperar el nivel 1 para la seguridad aérea mexicana, ya que hay que considerar que se planea la apertura del Aeropuerto Felipe Ángeles y la reestructuración de las rutas aéreas en la Ciudad de México.
«Mientras tanto seguiremos en número 2 y es muy delicado porque perdemos competitividad, y de ser en un país que iba en vías de desarrollo y crecimiento, con este tema estamos en un nivel menor», señaló.
Por lo que será el sector turístico el que pueda ayudar a recuperar al sistema de aviación nacional e incluso presionar al Gobierno Federal para cumplir los estándares internacionales de seguridad.
