San Luis Potosí, lunes 12 de mayo de 2025.- Este 12 de mayo, madres que no tuvieron un sábado con sus hijos desaparecidos caminaron por las distintas dependencias con rostros impresos en cartulinas, con la voz rota pero firme, y con la exigencia de justicia como bandera.
El colectivo Voz y Dignidad por los Nuestros, S.L.P. volvió a tomar las calles del Centro Histórico para denunciar la indolencia del Estado frente a la desaparición de personas en San Luis Potosí.
Desde temprana hora, las madres buscadoras se concentraron en la Caja del Agua para dar inicio a una marcha de protesta. Durante el recorrido, expresaron su profunda indignación contra la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), a la que acusaron de omitir sus responsabilidades e incluso de agredir simbólicamente su lucha, luego de que el organismo retirara las fichas de búsqueda que habían sido colocadas en sus instalaciones.
“¿Quién les dio el derecho de borrar la memoria?”, reclamaron con coraje. “Mientras ustedes limpian paredes, nosotras seguimos buscando en la tierra. Mientras ustedes callan, nosotras gritamos”.

La presencia del tercer visitador de la CEDH, Alejandro García Alvarado, fue rechazada por las manifestantes, quienes lo señalaron como representante de una institución muda, ciega y sorda ante una de las crisis más graves que enfrenta el estado.
Al llegar a Plaza de Armas, las madres buscadoras exigieron la atención directa del gobernador Ricardo Gallardo Cardona para dar respuesta a sus demandas, mismas que llevan tres años sin avances.
Reiteraron la necesidad de concretar la creación de una Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas, una propuesta que, según señalaron, ha sido presentada reiteradamente a todas las instancias correspondientes, incluido el propio mandatario estatal, sin obtener resultados.
También reclamaron la omisión institucional respecto a su exigencia de un memorial de reparación simbólica del daño, tanto en la capital potosina como en Rioverde, y urgieron a la Comisión Estatal de Derechos Humanos a elaborar un Informe Especial sobre Personas Desaparecidas, pendiente desde 2019.

El mensaje fue claro: no buscan flores ni felicitaciones, sino justicia y acciones concretas. “Este 10 de mayo no es de fiesta. Es de lucha y de protesta”, afirmaron.
La jornada culminó con un momento de tensión cuando el contingente se dirigió a la Fiscalía General del Estado, la cual cerró sus accesos ante la llegada de las manifestantes.
Sin embargo, las madres lograron irrumpir en las instalaciones y, ante la presión del grupo, fueron finalmente atendidas por la titular de la Fiscalía General del Estado, quien se vio obligada a recibirlas y escuchar sus exigencias.
Con firmeza, advirtieron que no se irán sin una fecha clara de cumplimiento a cada uno de sus reclamos, la cual —aseguraron— será publicada y contada en una cuenta regresiva diaria hasta que se cumpla.
“Las madres buscadoras no nos vamos a callar. No nos vamos a rendir. Y no nos vamos a ir de aquí sin ser escuchadas”.