San Luis Potosí, S.L.P., martes 29 de abril de 2025.– Tras más de ocho meses de separación, el pasado domingo 27 de abril Janeth, una mujer con discapacidad auditiva y de lenguaje, se reencontró con sus hijas como resultado de una resolución judicial que ordenó medidas de protección y estableció un régimen de convivencia con ajustes razonables.
La decisión fue emitida por el Juzgado Quinto Familiar, luego de una solicitud presentada por su abogada, con la intervención de una intérprete de lengua de señas. Es la primera vez en su proceso legal que se contemplan mecanismos de accesibilidad adecuados a su condición.
Janeth había firmado anteriormente un convenio en el que cedía la guarda y custodia de sus hijas sin haber comprendido plenamente los términos legales, debido a la falta de interpretación y a la ausencia de información clara sobre sus derechos. Ante esta situación, su abogada solicitó la nulidad del documento y promovió un nuevo proceso con base en ajustes razonables, conforme a lo establecido en la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y la legislación nacional.
El caso ha sido señalado como un ejemplo de las barreras estructurales que enfrentan las personas con discapacidad dentro del sistema judicial, donde la falta de accesibilidad puede traducirse en la vulneración de derechos fundamentales.
Fátima Viera, abogada del caso, subrayó que el acceso a la justicia debe garantizarse sin distinción de capacidades sensoriales o cognitivas, y que ello requiere implementar ajustes razonables para permitir una participación plena y efectiva.
Aunque el proceso continúa en curso, la resolución representa un precedente importante en la garantía del derecho a una justicia inclusiva y al ejercicio pleno de la vida familiar para personas con discapacidad.