El gobierno de Estados Unidos comenzó el uso de aviones militares para deportar migrantes, según informó Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca, quien compartió imágenes de personas esposadas subiendo a una aeronave. Los vuelos iniciales partieron desde Biggs Army Air Field con destino a Guatemala, transportando entre 75 y 80 ciudadanos guatemaltecos, confirmó un funcionario del Departamento de Seguridad Nacional.
El presidente Donald Trump ha endurecido las medidas contra la inmigración, cumpliendo con promesas de campaña que incluyen reestructurar políticas migratorias de la administración anterior. En sus redes sociales, Trump enfatizó que habrá consecuencias severas para quienes ingresen al país sin autorización.
Además de los vuelos militares, otras medidas adoptadas esta semana incluyen la cancelación de vuelos de refugiados, el despliegue de tropas adicionales en la frontera y la autorización a las autoridades para realizar detenciones en áre.
Estas acciones han generado controversia, incluyendo la oposición de líderes estatales y expertos legales. El gobierno también enfrenta desafíos en los tribunales debido a su propuesta de eliminar la ciudadanía por nacimiento, una medida que podría cambiar