En la cosmovisión ancestral mexica, la muerte no es un final, sino el inicio de un profundo viaje hacia el Mictlán, el lugar donde el alma halla reposo.

Sin embargo, para llegar hasta allí, cada espíritu debe atravesar caminos inciertos, ríos oscuros y enfrentar obstáculos que solo pueden superarse con la ayuda de un guía especial: el noble xoloitzcuintle, compartió Territorio Score.

Este guardián ancestral, conocido como el perro de los dioses, conduce a las almas hacia el descanso eterno, cruzando el umbral entre la vida y la muerte.

Este año, el Museo de la Filatelia de Oaxaca rinde homenaje a esos leales compañeros que caminaron a nuestro lado en vida y que ahora nos esperan más allá del velo con una ofrenda que fue inaugurada la noche de este miércoles.

La ofrenda de Día de Muertos está dedicada a los perros y a todas las mascotas que nos han dejado, pero cuya presencia sigue viva en nuestros corazones.

Por ello, el MUFI invita a formar parte de esta celebración de amor y memoria al visitar esta instalación y colocar una fotografía de ese compañero que, aunque ya no esté en este plano, aún aguarda pacientemente en la tierra de los no vivos, esperándonos en el umbral del Mictlan, donde, algún día, volveremos a encontrarnos.