El cambio climático podría afectar gravemente la cosecha de la flor de cempasúchil en San Luis Potosí, según informó el agricultor Humberto Quintana Rosales.

Las variaciones de temperatura y el riesgo de heladas mantienen a los productores en incertidumbre sobre si podrán vender lo sembrado desde agosto.

Quintana Rosales explicó que, a pesar del esfuerzo invertido, la cosecha depende del clima, lo que también influye en los precios. El año pasado, los manojos de cempasúchil se vendieron entre 50 y 150 pesos, dependiendo del tamaño, pero este año el costo final se determinará una vez que se logre o no recuperar la producción.

La cosecha de esta flor, que es símbolo del Día de Muertos en México, alcanza su punto máximo entre el 26 de octubre y los primeros días de noviembre. Su color y aroma son esenciales para las ofrendas dedicadas a los difuntos, una tradición que se mantiene viva en todo el país.

En las culturas prehispánicas, el cempasúchil, de color amarillo, estaba relacionado con el sol. Los senderos de estas flores, desde la entrada principal hasta los altares, guiaban las almas de los muertos de regreso a casa durante las festividades.