La enfermera Trinidad Zúñiga, con 31 años de servicio en el Hospital General de Rioverde -en la zona media potosina- se contagió de Covid 19 luego de recibir la primera dosis de la vacuna y murió sin poder recibir el refuerzo.

Hoy fue despedida con una guardia de honor frente al hospital general, ahí se colocó un altar con su fotografía y momentos después salió su cuerpo escoltado por empleados de servicios funerarios, para ser entregada a sus familiares y darle cristiana sepultura.

Sus compañeros contrataron a un mariachi como el que tocaría el día que ella se jubilara, día que no llegó, pues esta pandemia volvió a arrebatarle al personal de Salud lo más valioso para ellos, quizá a la par de la salud de los pacientes: sus compañeros de profesión.

Lágrimas, aplausos, pero una profunda tristeza acompañó las notas del mariachi; varias canciones sonaron mientras Trini era conducida hacia una carroza que posteriormente la trasladaría hasta la funeraria y de ahí para ser despedida por sus familiares.

Sus compañeras, que tenían mucho que decir sobre Trini, guardaron silencio ante las cámaras, vivieron su duelo y la tristeza de ver a una colega caída en desgracia por una pandemia que ha arrebatado a muchas mujeres y hombres.

Cuestionado al respecto en conferencia de prensa, el secretario de salud Miguel Lutzow Steiner, dijo que de acuerdo al periodo de incubación del virus, es posible que la enfermera ya estuviera contagiada al momento de la aplicación de la vacuna de protección, sin embargo, aceptó que este caso debe ser analizado científicamente.

El médico explicó que las vacunas son seguras y eficaces, pero es necesario esperar aproximadamente 10 días para que se desarrollen los primeros anticuerpos y posteriormente aplicar la segunda dosis para reforzar la inmunidad, pero aun así se debe continuar con todas las medidas sanitarias.

Cabe destacar que la primera dosis comenzó a aplicarse entre el personal del Hospital General de Rioverde el 13 de enero y por escasez de esta, el refuerzo lo recibieron hasta el 18 de febrero, tardanza que según el propio secretario de Salud no afecta la efectividad.
Trinidad Zúñiga era parte de la estadística de pacientes re infectados de Covid 19.