Juan Antonio Villa Gutiérrez, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de la capital, dio a conocer que son más de 900 personas las que participan en las actividades de trabajo a favor de la comunidad como medida de reparación del daño por faltas al Bando de Policía y Buen Gobierno, una alternativa a la detención que hasta la fecha suma más de 8 mil personas que han pagado su condena de esta manera.

Entre las faltas cívicas más comunes se encuentra escandalizar en la vía pública, ruido excesivo en las calles y consumo de bebidas embriagantes en la calle, aunque no todos los infractores pueden gozar de este beneficio, pues primero deben pasar por una evaluación de perfil para determinar el tipo de reincidencia en la que pudiera caer la persona, ya que con este estudio psicológico se puede determinar si debe tener horas de arresto o bien puede optar por servicio a la comunidad.

Villa Gutiérrez señaló que cuando se hace trabajo a favor de la comunidad “lo que hacemos es ir a espacios públicos, aquellas colonias que hemos visitado semana con semana y lo que hacemos es que se les hace una citación para efectos de que se presenten, el día domingo llegan y de ahí se les traslada el punto donde se va a llevar a cabo esta recuperación de espacios”.

El titular de la dependencia municipal aclaró que cuando los infractores llegan a los espacios van identificados todos, tanto jueces como áreas administrativas con un chaleco que dice Justicia Cívica, con esto se busca no estigmatizar a nadie, sino que se sientan parte de la dinámica de trabajo.

Entre las actividades que se realizan están desde la poda de árboles, recuperación de bardas con trabajo de pintura, arreglo de parques, entre otras actividades que de alguna manera otorguen un beneficio a la comunidad y a sus habitantes.

Finalmente puntualizó que cuando los infractores son menores de edad lo que se hace es solicitar la autorización del tutor o del papá para que ellos puedan acudir en coordinación con los menores de edad para que se integren al beneficio en favor de la comunidad.

Agregó que por la edad más bien a ellos lo que hemos hecho es que hemos trabajado a manera de terapia, en otros aspectos en donde siempre tiene que estar la autorización de los papás o de tutor.