Al menos 104 palestinos murieron y más de 700 resultaron heridos luego de que el ejército de Israel disparó a una multitud que intentaba recoger la primera entrega de alimentos en un mes en esta zona de la Franja de Gaza.
Empleados de un hospital cercano dijeron a la emisora local Al Jazeera que los ciudadanos que se abalanzaron a los camiones que iban a entregarles alimentos fueron alcanzados por drones, disparos y artillería.
Poco más de una decena de heridos fueron trasladados a hospitales en ambulancias, mientras que el resto se transportó con dificultad en carros arrastrados por burros.
De acuerdo con el periódico Mundo, el Ejército israelí dijo haber disparado contra los civiles que se acercaron a los camiones para conseguir comida, aunque asegura que abrió fuego después de que se produjera una situación de peligro debido al acercamiento de decenas de personas a tropas estacionadas en el área.
«Varias personas que rodeaban los camiones se acercaron a los soldados israelíes que controlaban la seguridad del paso de los camiones. La muchedumbre se acercó a las tropas de manera que supusieron una amenaza para los soldados, que respondieron abriendo fuego. El incidente está bajo investigación», añade la nota.
El Ejército de Israel difundió un video en redes sociales de imágenes aéreas de este jueves por la mañana, en las que se ve una multitud acercándose a una caravana de camiones.
El Estado mayor relató que los palestinos resultaron heridos por «pisoteos» de la multitud «violenta» que intentaba «saquear» los camiones de ayuda, aseguraron en un comunicado citado por medios israelíes.
En los últimos días ha habido caos, tensión y altercados por conseguir algo de comida o agua ante la falta de entrada de ayuda humanitaria, lo que está provocando graves problemas de malnutrición a miles de civiles, especialmente niños.
La ciudad estaba prácticamente aislada desde hace semanas por el conflicto y los afectados habían acudido a la zona ante el anuncio de llegada de ayuda humanitaria.
Era el primer convoy con alimentos que llegaba en 30 días, después de que Naciones Unidas denunciara el empeoramiento de la hambruna de cientos de miles de palestinos desde que empezó la guerra a principios de octubre.
Según las autoridades de Gaza, esta semana han muerto seis niños por deshidratación y malnutrición debido a la falta de entrada de alimentos al enclave.
Dos niños murieron en el hospital al-Shifa en la ciudad de Gaza el miércoles y otros cuatro en el centro sanitario de Kamal Adwan, en el norte del enclave. Otros siete permanecen en estado crítico, según el ministerio de Salud de Gaza.
De acuerdo con datos de Naciones Unidas, una cuarta parte de la población de 2.3 millones de Gaza se encuentra al borde de la hambruna.
Antes de la guerra entraban a diario 500 camiones de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, sin contar la entrada de suministros comerciales habituales, según datos de Jonathan Fowler, portavoz de la agencia de refugiados de la ONU.
Desde el 7 de octubre, el pico de entrada de camiones se produjo durante el alto el fuego, con la entrada diaria de 300 camiones. Sin embargo, después de noviembre la entrada de ayuda humanitaria ha caído significativamente, con el ingreso de 10 camiones diarios.
