Katalin Karikó,
Laureada Nobel en Medicina
y Fisiología, octubre de 2023.
Aunque hay eventos que detonan la incidencia del conocimiento, no es casualidad que la ciencia sea componente de soluciones a necesidades de la sociedad, sino que es resultado de la estructura de un ecosistema científico sano y su consolidación.
En estos días, como cada año, se dan a conocer los resultados para los premios Nobel, en esta ocasión, como era de esperarse, se ha otorgado a quienes investigaron las bases para resolver el problema mundial que significó Covid 19; no se sabía el enfoque y ponderación de la deliberación, pero se esperaba, como ha sido, para alguna componente de la solución a ese problema global.
La decisión yace en el par Conocimiento-Educación, CE; el premio se ha otorgado a dos profesionales que por décadas han generado conocimiento en torno al ARN, comprensión que resultó esencial para la concreción de diferentes biotecnologías hacia la fabricación masiva de vacunas antiCovid, en sus diferentes variantes.
El asunto ilustra, como otros casos, que el par CE es un elemento estructural de un ecosistema científico sano, de lo cual deben aprender quienes tomen decisiones en México hacia políticas públicas en Ciencia, Tecnología e Innovación, CTI.
Es el caso que los ahora laureados laboran en una universidad con la actividad principal de, por decenios, generar conocimiento propio tanto como formar recursos humanos; su quehacer y saber yace en el par CE.
Luego, un evento, aunque no siempre ésta es la ruta, detona la necesidad de concretar en más conocimiento propio, desarrollar tecnología y satisfacer una necesidad de mercado.
Así se da la incidencia desde el CE hacia la tripla Ciencia, Tecnología e Innovación, CTI; de facto, constan distintas soluciones desde la CTI como diferentes aproximaciones científico-tecnológicas (hay diferentes vacunas, pues).
Destaca que, en primera instancia, dadas las características específicas de la necesidad (de carácter pandémica), el mercado emergente y urgente era la sociedad a través de actos de gobierno en todo el mundo; ahora además de la necesidad de gobiernos para atender la salud pública, emerge el mercado de particulares, quienes pueden adquirir la vacuna.
Ahora, ya en calma post-tormenta, luego de pasada la prisa por la pandemia, hay incidencia desde el par CE y la tripla CTI hacia el par Cumplimiento-Normatividad; CN; es decir, la producción masiva industrial sistemática de las vacunas requiere que se siga, incuso se adapte, la normatividad y se vigile el cumplimento de ésta a fin que la molécula distribuida o cause mas problemas al suministrarse en estrategia de vacunación.
Al detenerse en otros casos, entonces se pueden identificar estos tres elementos, CE, CTI y CN en soluciones que la ciencia ha dado a necesidades de la sociedad; cada caso con distinto orden de incidencia y características de la necesidad, pero ahí están los tres.
Los modelos que en países como México se adoptan y asimilan quedan rezagados por imprecisión y falta de reflexión; son el caso de aquellos conocidos como la triple hélice o el de pentahélice, que, si bien tienen capturan cierto sentido para la gestión, se quedan cortos para la elaboración de políticas públicas.
