El estado de San Luis Potosí enfrenta un final de año preocupante en cuanto a agresiones, según revelan datos del Observatorio Nacional Ciudadano. Hasta el cierre de noviembre, la tasa de víctimas de lesiones dolosas alcanzó un preocupante 10.9 por cada 100 mil habitantes, colocando al estado en la posición 11 a nivel nacional.
Lo más inquietante es que los municipios de Salinas, Venado y Armadillo de los Infantes emergen como los focos rojos, con tasas de 29.55, 25.83 y 22.86 víctimas por cada 100 mil habitantes, respectivamente. Estas cifras representan un aumento con respecto al mes de octubre. En contraste, la capital potosina muestra una disminución considerable, ocupando el lugar 14 con una tasa de 12.08 víctimas.
La activista Daniela N destaca la preocupante tendencia de aumento de estos delitos en los últimos meses del año. Según ella, en los diez primeros municipios de la lista, prevalece una fuerte estructura machista y altos índices de violencia contra las mujeres. La combinación de esta realidad con el ambiente festivo de la temporada eleva la incidencia de estas situaciones.
Daniela N no generaliza, pero señala un preocupante número de accidentes viales relacionados con el consumo de alcohol durante esta temporada. Aunque estos casos no se consideran dolosos, podrían contribuir al actual panorama de violencia. «El abuso de alcohol vuelve violentas a las personas, muchas veces agrediendo a sus parejas, principalmente mujeres, así como a sus hijas», declara la activista. El sentimiento de superioridad e impunidad alimenta la continuidad de estos delitos, concluye.