La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) celebró la conclusión del Título 42, política adoptada por el gobierno de los Estados Unidos de América (EUA) para la expulsión inmediata de personas en contexto de migración en sus fronteras.
Sin embargo, recuerda que siguen vigentes otras medidas que criminalizan la migración irregular hacia aquel país.
El Título 42 autorizaba en sus secciones 362 y 365 al director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (Centers for Desease Control and Prevention – CDC) a determinar quiénes representaban un riesgo para la salud pública al ingresar a los EUA y, derivado de ello, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP) impuso restricciones para las personas que ingresaban desde México o Canadá.
La CNDH se pronunció en su momento sobre dicha medida a través del análisis de contexto, en el Informe Especial sobre los Protocolos de Protección a Migrantes (MPP)-Programa Quédate en México, 2019-2021, considerando la ilegalidad de la política de expulsión que nació en el gobierno de Donald Trump y que consistía en la expulsión de personas migrantes que ingresaban a aquel país de manera irregular.
Ante el anuncio del gobierno de los EUA mediante el cual precisó que a partir del 12 de mayo de 2023, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) dejará de requerir que los viajeros, que no sean ciudadanos estadounidenses y que busquen entrar a los EUA por puertos de entrada terrestre o terminales de ferry, muestren esquemas de vacunación completos contra el COVID-19, entre otras restricciones.
Migrantes siguen siendo ilegales La CNDH hace hincapié que la cancelación de Título 42, no significa que el gobierno de los Estados Unidos de América modifique el sentido sustancial de su política migratoria y autorice el ingreso de las personas migrantes que viajan en condición irregular.