Los dos cadáveres encontrados con huellas de violencia en un monte al sur de Rioverde, fueron identificados hasta el momento de manera extraoficial, como dos presuntos ladrones apodados El Cisne y El Burbante, cuyos cuerpos fueron decapitados, las manos estaban desprendidas del cuerpo y uno de ellos parcialmente desollado.

Una cabeza y sus manos fueron removidas y colocadas en otras partes del cuerpo. En el torso de uno de ellos pegado con cinta canela, se encontró un recado que hacía referencia a que les pasó eso por rateros.

Este doble homicidio es una de las escenas más terribles ocurridas en los últimos años en Rioverde y demuestra la escalada de violencia que se vive en el estado y tiene tintes dramáticos al conocerse que una de las víctimas, es un hombre que el 21 de febrero pasado fue amarrado en un poste por vecinos de las calles Matamoros e Independencia, hartos por los robos cometidos por este sujeto.

A pesar de esa acción de los ciudadanos, durante los recientes días volvió a ser exhibido robando en diferentes sectores de la ciudad.

La furia de los asesinos fue aún más contra este sujeto identificado como el Burbante, pues no solo le cortaron las extremidades superiores, sino también la cabeza.

Cabe recordar que el hallazgo ocurrió en un predio entre los poblados de Puente del Carmen y Rancho La Virgen la mañana del sábado, sitio que fue resguardado por personal policiaco para el inicio de las investigaciones.

El primer respondiente fue la Policía Municipal alertados por un reporte ciudadano, quienes verificaron la existencia de los cadáveres a la orilla de un camino de terracería a 5 minutos de camino de Rancho La Virgen.

Al lugar acudió la Policía de investigación y un solo elementos de Servicios Periciales.
La ciudad había mantenido una cierta calma desde el pasado 11 de febrero que se suscitó el último homicidio de una racha que superó las 25 ejecuciones.