La humanidad tocó a la puerta del Presidente.
Andrés Manuel López Obrador, dio el aviso sobre su contagio de Covid 19 y sacudió a un país que no está en su mejor momento, porque a diez meses de iniciada la pandemia se ha extraviado mucho; vidas, empleos y esperanzas, pérdidas vertidas en una ola de sorna y salvajismo donde emerge la peor podredumbre espiritual.
Y lo vimos en cada mensaje, meme, video y publicación que hizo escarnio con la noticia, son vox populi las expresiones desatinadas que hizo el gobernante durante los primeros meses de la contingencia (nadie olvida el Detente) pero no justificarían que se le auguren malos pronósticos; el yerro de quienes lo hacen, estriba en que ignoran o desestiman la gravedad de lo que implica un Presidente con salud comprometida, el peligro de desestabilizar al país social y políticamente, además de la seguridad nacional expuesta.
No solo por su investidura, sino porque en efecto estuvo concentrado con todo el gabinete de Seguridad del país y eso tiene sus implicaciones, sus riesgos y son graves; si se apegan al protocolo sanitario que dicta la pandemia, deberíamos ver en confinamiento de 14 días al titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval; a Luis Rodríguez Bucio, de la Guardia Nacional y a la potosina, Rosa Icela Rodríguez, Secretaria de Seguridad Ciudadana.
Todos presentes en la gira y en contacto directo con el mandatario, de ese tamaño es el riesgo para la seguridad del país.
Vale la pena recapitular los últimos días de actividad del tabasqueño que dirige los rumbos del país, es público que le someten a prueba de Covid 19 cada martes y con la misma periodicidad recibe resultados, es decir, al menos al martes 19 de enero no habría dado positivo ni presentado malestar.
Esto implicaría que sus primeros síntomas tuvieron que haber aparecido entre miércoles y domingo, surge la inquietud de saber si en tierras potosinas ya tendría alguna dolencia que motivó un examen médico extraordinario para el mandatario.
No podríamos asegurarlo y difícilmente conoceremos detalles, lo que sí traemos a cuentas es que vimos una gira con un Presidente apagado, sin el discurso vigoroso que acostumbra y con una barrera que no existía en otro periodos de la pandemia, cuando -igual que en los dos días de gira en SLP- el mandatario tampoco usaba cubrebocas.
Bajo estas condiciones, mañana asumirá nuevas responsabilidades la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, al encabezar la conferencia mañanera. Esperemos noticias.